Ayer vi a la reencarnación más cercana a un dios o a un extraterrestre y se llama Lionel Messi.
Lo suyo ya no se puede llamar fútbol, es arte elevado al máximo exponente. Los físicos deberían estudiarlo y los demás alabarlo. Cuatro goles y la madre que lo bien parió. Jamás vi algo así, lo que puede ser el mejor jugador de la historia del fútbol… con 22 añitos.
Si tuviera que elegir el dios más parecido a este crack, sería Hermes/Mercurio. No porque se follase a su hermana, sino porque tenía alas en las sandalias. Como Messi. Ole sus cojones y visca Barça.
• Hexagram – Deftones